Misión personal, Yael Nino

Mendigando voy… mendigando vengo…

Hay muchos mendigos disfrazados con grandes coches, lujosas casas, fincas, aparente éxito, buscadores de reconocimiento, hambrientos de aceptación, honorabilidad, poder, posiciones políticas, ladrones con permiso legal de la población elegidos en urnas o anónimos mendigando de sus parejas e hijos….

 ¿Qué disfraz llevas tú?

Aquel que se cree libre dentro de un sistema de borregos, los cuales se creen lo que cualquiera dice con título universitario: ¡ese sabe!, porque ha estado unos años entre conceptos y conceptos y un mínimo de práctica efímera.  Le damos tanto valor a las calificaciones de los demás basados en conceptos, y menospreciamos la experiencia de la realidad ultima de la verdad en sí misma, esa verdad intrínseca a cada ser humano…  La verdad de lo invisible que solo se puede adquirir en la experiencia.

Sin profundizar en uno mismo; no dedicas tiempo a lo importante. 

No sabes cuál es tu pasión y mayor talento

Menosprecias tus talentos y no le dedicas tiempo a desarrollar tu pasión.

¿Estás a la espera de migajas de tiempo y energía para poner en práctica algo que te satisface solo a ti por el gozo de existir?

«Sin profundizar en uno mismo; no dedicas tiempo a lo importante.»

¿Te convences a ti mismo que ya llegara el día que tengas tiempo para destinar tiempo a tú verdadera pasión? 

¿Pasan los días sin trascender en ti mismo ni en los demás?   Esperando con necesidad que sean los demás que te den algo de lo que según tú te tienen que dar.

 ¿Te regodeas en ropas andrajosas del victimismo sin ocuparte de ti mismo o sobre ocupándote de los demás, ahogándoles con tu sobre atención, y no permitirles que se desarrollen al potencial que pueden?

Deseas llenar tus vacíos interiores con más comida, más sexo, más bienes materiales, más ruido, más dinero, más mujeres, más hombres, etc…  más y más de lo que sea que esté disponible para un mendigo.

Mendigando

En la naturaleza todo es libertad y abundancia; todo es amor, por tanto, es antinatural e inhumano la actitud del avaro y del mendigo.

Te conformas con lo que sea con tal de formar parte de la manada incluso en contra de ti mismo.  Aparentar y aparentar para ser mirado o admirado y así ser alguien dentro de la comunidad.   Cualquier actitud de estas te convierte en un mendigo.

Hay miles de disfraces de mendigos.

Te convertirás en acumulador de bienes y llegara un momento que ya no haya sitio para acumular.

Y el vaco será cada vez más profundo.

¿Llenas sótanos y rincones de cosas, generando energía estancada?

¿Tienes miedo a que te falte?, a que un día puedas necesitarlo y no tenerlo?

Sea como sea, es síndrome de Diógenes de la clase media  y vibrar en la pobreza de mente y corazón.

Una mente que piensa en carencia es un corazón cerrado.

Nada en el universo puede estancarse. 

El disfraz del intelectual que tiene una explicación para todo, pero no se atreve a experimentar nada, y se queda en meros tecnicismos; se convierte en un ignorante repleto de palabrería.

El disfraz del que cree que sabe y no sabe, atreviéndose a criticarte sin haber pasado por una experiencia parecida ni ser conocedor del tema en cuestión; y sin haber estado dentro de ti en cada momento como para tener algún criterio en su juzgamiento.

El informado al segundo, esperando a la siguiente noticia salida del horno de la maquina manipuladora de las noticias en los periódicos y televisiones.   Poder hablar y comentar con otros que como él se alimentan de las suposiciones, conjeturas y superficialidades que nos muestran en la desinformación de los noticiarios. Ocupándose en la crítica y el juicio constante alimentando la máquina del miedo.

Síndrome de Diógenes de la acumulación de información que no usa para nada constructivo, acumula y acumula sin ningún beneficio.

O bien acumulas frialdad de experiencias no permitidas, de miedos que te paralizaron, de limitaciones que te inventaste en la mente…    acumulación de miedos y más miedos que no te has permitido vivir…

Nuestro envase nunca se llenará con cosas que estén fuera de ti, toda la naturaleza está disponible para embriagarte con su sabiduría, y su armonioso equilibrio.

Jamás se llenará el vacío interior; si no le llenas de tu propio ser, y reconoces tu verdadera naturaleza espiritual.

Sea cual sea la posición que optes si estas limitando el amor, el servicio a la humanidad y solo redirigiéndolo a unos pocos o a ninguno te has convertido en un avaro emocional con unos y un mendigo emocional con otros.

¡Mendigo o avaro qué más da!

Son las caras de la misma moneda

Recibir como un mendigo es eso mendigar las sobras y dar pena;

En cambio, si mendigas libertad eres un esclavo.

Sea cual sea la posición que hayas elegido en la sociedad

En la naturaleza todo es libertad y abundancia; todo es amor, por tanto, es antinatural e inhumano la actitud del avaro y del mendigo.

Mendigar, acaparar, acumular, retener, contener, en definitiva, miedo y más miedo…